Los abogados de Trump siguieron manteniendo este jueves la inocencia del expresidente.
“El presidente Trump ha sido acusado. No ha cometido ningún delito”, dijeron los abogados Joe Tacopina y Susan Necheles en un comunicado. “Lucharemos enérgicamente contra esta acusación política en los tribunales”.
Trump emitió un comunicado poco después de que se anunciara la acusación, calificándola de «cacería de brujas» y diciendo que la medida era un intento de los demócratas de interferir en las elecciones de 2024.
“Esto es persecución política e interferencia electoral al más alto nivel en la historia”, escribió Trump en su comunicado. «Los demócratas mintieron, engañaron y robaron en su obsesión por tratar de ‘atrapar a Trump’, pero ahora han hecho lo impensable: acusar a una persona totalmente inocente en un acto de interferencia electoral flagrante».
Trump también arremetió contra el fiscal de distrito Alvin Bragg, diciendo que está “haciendo el trabajo sucio de Joe Biden”.
La oficina del fiscal de distrito pidió que Trump se entregara el viernes, pero los abogados de Trump respondieron que el plazo era demasiado ajustado y dijeron que el Servicio Secreto de EE. UU. necesitaba más tiempo para prepararse, según un funcionario de inteligencia policial. Tacopina confirmó el intercambio y agregó que no se había fijado una fecha para la entrega del expresidente. Un portavoz de la oficina del fiscal de distrito no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Trump ha tratado anteriormente de usar los cargos para reunir a su base, llamando a sus seguidores a protestar y «recuperar nuestra nación». Pero no hay precedentes de un candidato presidencial haciendo campaña en su propio juicio penal. Y aunque el caso podría extenderse más allá de noviembre de 2024, una condena antes de esa fecha desencadenaría una serie de cuestiones constitucionales.
Sigue la acusación de Trump la sentencia de diciembre no relacionada de su negocio familiar, la Organización Trump, por evasión de impuestos en un caso también procesado por Bragg.
La acusación de Trump se deriva de la condena federal de 2018 de su exabogado Michael Cohen, quien se declaró culpable para hacer campaña contra las infracciones de financiación por facilitar el pago a Daniels. Ese pago se produjo en medio de la campaña presidencial de 2016. Y Cohen y los fiscales federales dijeron que actuó «en coordinación y bajo la dirección» del expresidente.
“Mantengo mi testimonio y la evidencia que proporcioné al fiscal de distrito de Nueva York”, dijo Cohen el jueves durante una entrevista en MSNBC. Si bien la acusación es «importante», dijo Cohen, «es extremadamente importante que dejemos que se lleve a cabo el proceso y que la gente aún entienda que existe una presunción de inocencia en este país».
La Organización Trump luego reembolsó a Cohen por el pago a Daniels, dijeron los fiscales en documentos judiciales. Los ejecutivos de la compañía autorizaron pagos de $420,000 a Cohen en un esfuerzo por cubrir su pago por adelantado y sus obligaciones fiscales, y para recompensarlo con una bonificación, dicen los fiscales. La Organización Trump Equivocadamente registró estos pagos en sus libros como honorarios legales, dijeron los fiscales.
Los fiscales federales de la Oficina del Fiscal Federal en Manhattan luego llevaron a cabo una investigación criminal para determinar si esos pagos violaron la ley de financiamiento de campañas, pero luego dieron por terminada la investigación. gratis.
El ex director financiero de la compañía, Allen H. Weisselberg, a quien los fiscales federales le otorgaron inmunidad en su investigación sobre el dinero oculto que condujo a los cargos contra Cohen, declarado culpable a un esquema de evasión de impuestos no relacionado en agosto de 2022.
Cohen testificó ante el gran jurado en la investigación del fiscal de distrito de Manhattan sobre Trump. No está claro si Weisselberg, que actualmente cumple una condena de cinco meses de prisión, también fue llamado como testigo.
Aunque la oficina del fiscal de distrito le ofreció a Trump la oportunidad de testificar ante el gran jurado antes de su acusación, él se negó a hacerlo.
La acusación sin duda empañará la campaña presidencial de Trump de 2024 y desencadenará una serie de escenarios sin precedentes. Si se declara inocente y el caso va a juicio, un proceso que puede demorar varios meses, podría enfrentar la posibilidad de hacer campaña por la Casa Blanca mientras enfrenta un juicio penal. Y si ganara un segundo mandato mientras enfrenta o cumple una pena de prisión, daría lugar a una serie de problemas constitucionales.
Trump dijo que una acusación no le impediría hacer campaña para otro mandato. Cuando se le preguntó si permanecería en la carrera de 2024 si se le acusaba formalmente, Trump dijo a los periodistas en CPAC en marzo«Oh, absolutamente. Ni siquiera pensaría en irme. Dijo que sus partidarios estaban «muy molestos» con las múltiples encuestas que enfrenta y agregó que creía que las encuestas «mejorarían» sus números de encuesta.
A lo largo de su presidencia y en su vida después de la Casa Blanca, Trump se ha presentado como víctima de investigaciones partidistas de «cacería de brujas» dirigidas a él y sus conexiones comerciales. Sus colegas republicanos se hicieron eco en gran medida de esa afirmación, aunque queda por ver si los que se postulan para la nominación presidencial del partido se unirán al lado de Trump o lo rechazarán.
Al menos un posible rival republicano en 2024, el exgobernador de Arkansas Asa Hutchinson dijo que Trump debería termina tu campaña tan cargado